Gracia en Cristo: Abordando la Toráh en el Brit Hadashá

miércoles, 26 de mayo de 2010

Abordando la Toráh en el Brit Hadashá

Abordando la Toráh en el
Brit Hadashá
Por
Neftalí Rubio B.

Para comenzar este comentario, antes de nada me gustaría hacerlo desde los cimientos y la base del PR (Pacto Renovado, "N.T."), la base de nuestra fe, de todo el Tanáj, Yeshúa HA MASHIAJ, Él es la base, el fundamento y el cimiento, que estando edificados sobre Él (la Roca), auque vengan lluvias torrenciales, ríos y vientos impetuosos, nada conseguirá destruirnos y derrumbarnos de Él. ¡Amén! Mt 7:24-27.

En numerosas ocasiones se nos ha enseñado a vivir sin la Toráh de Elohím/Dios (mal conocida o presentada como la Ley judía o mosaica, pero esto no es exactamente así, sino que ésta Ley/Toráh pertenece al Kadosh/Santo de Israel, a Elohím mismo YHWH (Dt 19:5). Es la instrucción directa de Él para que vivamos por ella, tanto el pueblo Hebreo como los “extranjeros que moran entre ellos”, es decir, los gentiles que no pertenecen directamente por sangre al pueblo hebreo, pero en nuestro caso, en la era Mesiánica, los que hemos sido injertados al Olivo de Romanos 11), debido a que ésta ya fue abolida, clavada en la cruz por Jesús; y esto no es una invención o una línea doctrinal, sino que en los textos bíblicos que nos han llegado podemos encontrar versículos que aparentemente parece que están afirmando esta enseñanza tan inculcada en nuestra cultura cristiana occidental, pero esto ocurre por el motivo de la mala información y el escasísimo conocimiento que tenemos de las raíces hebreas y la cultura de la época y la cultura actual inclusive.

Por ejemplo podemos mencionar algunos claros ejemplos tales como:

Ro 6:14 Porque el pecado no se enseñoreará de vosotros; pues no estáis bajo la ley, sino bajo la gracia.

Ef 2:15 aboliendo en su carne las enemistades, la ley de los mandamientos expresados en ordenanzas…

Gal 3:13 Cristo nos redimió de la maldición de la ley, hecho por nosotros maldición (porque está escrito: Maldito todo el que es colgado en un madero)

Gal 3:10 Porque todos los que dependen de las obras de la ley están bajo maldición, pues escrito está: Maldito todo aquel que no permaneciere en todas las cosas escritas en el libro de la ley, para hacerlas.

Así que antes de comenzar a desarrollar la explicación de estos versículos y muchos otros, como comentábamos al comienzo del artículo, debemos de basarnos en el fundamento, en los cimientos, y comenzar a analizar las enseñanzas principales y más sólidas, las de nuestro Adonai/Señor Yeshúa/Jesús, ya que nuestra fe/emunáh está fundamentada en Él y por lo tanto creemos que Su Palabra es verdadera al 100% y que cualquiera podría equivocarse y contradecirse, tal como “aparentemente” podríamos creer del Rav Shául en sus epístolas/cartas que aclararemos mas adelante, pero del Adonai Yeshúa nuestro Mashíaj, esto es inconcebible o así debería de serlo.

Analizando los comienzos del ministerio del Rabí Yeshúa, justo en el principio, en una de sus enseñanzas, Él está dejando explícitamente claro que la Ley/Toráh no va a ser abolida, ni siquiera que va a dejar de existir por lo menos hasta que no pasen el cielo y la tierra, y a continuación enseña que es lo que ocurrirá a quien cumpla y enseñe los mandamientos y que ocurrirá a quien no los cumpla y enseñe; en Mt 5:17-20 [RV95] dice:

17 »No penséis que he venido a abolir la Ley/Toráh o los Profetas; no he venido a abolir, sino a cumplir,
18 porque de cierto os digo que antes que pasen el cielo y la tierra, ni una jota ni una tilde pasará de la Ley/Toráh, hasta que todo se haya cumplido.
19 De manera que cualquiera que quebrante uno de estos mandamientos muy pequeños y así enseñe a los hombres, muy pequeño será llamado en el reino de los cielos; pero cualquiera que los cumpla y los enseñe, este será llamado grande en el reino de los cielos.
20 »Por tanto, os digo que si vuestra justicia no fuera mayor que la de los escribas y fariseos, no entraréis en el reino de los cielos.

Entonces por primera vez, nada mas comenzar a leer el PR, el propio Yeshúa nos está enseñando y dejando claro cual es Su posición frente a la Toráh/Ley, inmediatamente al comenzar la lectura del Nuevo Testamento desde su comienzo, Yeshúa nos enseña todo lo contrario de los que se nos a estado enseñando durante varios años y generaciones, ¡¡Qué curioso!!.

Se nos enseñó lo que al principio mencionábamos a cerca de la Toráh, que aparentemente con los versículos expuestos, parece incluso que la Ley es una maldición como se nos muestra en Gal 3:13, pero encontraríamos  una incongruencia bien grande, y es que el Apóstol Pablo estaría enseñando lo contrario que el Señor Jesús, ¿Cómo puede ser esto? Más adelante intentaremos resolver esta cuestión.

Veamos más textos donde Yeshúa nos habla y enseña a cerca de la Toráh, enfrentando así las enseñanzas de Pablo que aparentemente son contradictorias a las enseñanzas del Rabí Yeshúa ha Mashíaj.

En Mt 7:23 encontramos este conocido versículo, [RV95]:

23 Entonces les declararé: "Nunca os conocí. ¡Apartaos de mí, hacedores de maldad!"

En las traducciones bíblicas de las que hoy disponemos, encontramos en este versículo al Adonai Yeshúa dando una enseñanza (dentro del contexto Mt 7:21-23) de que quien no hiciese la voluntad del Padre, por muchos “milagros” que hiciese, por muy bueno que se sea, al no hacer la voluntad del Padre, Yeshúa nos exhorta con estas duras palabras que encontramos en el v.23: “Apartaos de mí”

Antes de seguir, deberíamos preguntarnos antes, ¿Cuál es la voluntad del Padre? Creo que en pocas ocasiones nos hemos hecho esta pregunta, y si nos la hemos hecho la respuesta normalmente suele ser: el ser buenos, el hacer el bien, imitar a Cristo, etc….

Esta pregunta se resuelve rápidamente al ir al versículo 23 en griego y analizarlo. Aquí entonces nos encontramos con una “sorpresa”, una palabra en griego cuyo significado cambia por completo la interpretación del texto, esta palabra es ανομíα/anomía (Nº Strong 458) que en sí quiere decir “violación de la Ley/Toráh), que a su vez esta palabra viene de la raíz ανομos/ánomos (Nº Strong 459) que significa (sin Ley/Toráh, no sujeto a la Ley/Toráh judía), por lo tanto el versículo 23 en su traducción al griego, o lo que hoy conocemos como los textos originales, debería de decir lo siguiente:

“Entonces les declararé: “Nunca os conocí, ¡Apartaos de mí, LOS QUE NO OS SUJETAIS A LA TORÁH/Ley!”

Por lo tanto Yeshúa nos está declarando cual es la voluntad del Padre, sujetarnos a la Toráh dada por el Padre.

Existen más versículos de los que compartir y exponer, donde Yeshúa nos sigue hablando de guardar los Mandamientos/Ley/Toráh, pero por motivos de espacio y para simplificar, me veo obligado a resumir el comentario.

Para ir concluyendo esta aclaración de los cimientos de nuestra fe/emunáh a cerca del Adonai Yeshúa, y su posicionamiento frente a la Toráh Santa dada por el Padre, no debemos de olvidar que en la época en la que estaba sucediendo el Nuevo Testamento, cuando se estaba refiriendo al término “Palabra/Escritura/Mandamientos”, como por ejemplo:  Jn 8:55 “Vosotros no lo conocéis. Yo sí lo conozco y, si digo que no lo conozco, sería mentiroso como vosotros; pero lo conozco y guardo su Palabra”.

Lc 24:32 “Y se decían el uno al otro:
    --¿No ardía nuestro corazón en nosotros, mientras nos hablaba en el camino y cuando nos abría las Escrituras? “

Hch 17:11 “Estos eran más nobles que los que estaban en Tesalónica, pues recibieron la palabra con toda solicitud, escudriñando cada día las Escrituras para ver si estas cosas eran así.”

Jn 14:15 “Si me amáis, guardad mis Mandamientos.
Se estaban refiriendo a la Toráh y los Profetas, el Antiguo Testamento/Tanáj, ya que en la época del Nuevo Testamento, éste no existía, pues se estaba desarrollando, estaba sucediendo, y aún no había dado tiempo de escribirlo.

Un punto importante a tener en cuenta es lo que dice el versículo de Juan 1:1 “En el principio era el Verbo/(λογος/lógos)/Palabra/Toráh, el Verbo/(λογος/lógos)/Palabra/Toráh estaba con Dios y el Verbo/(λογος/lógos)/Palabra/Toráh era Dios”.

Curiosamente, el Talmid/Discípulo Iohanan/Juan, nos está describiendo aquí a la persona de Elohím Yeshúa ha Mashíaj, donde profundizando podemos entender mejor las 3 esencias de Elohím mal conocidas como “La Trinidad”, ya que Elohím es Uno, Elohím Ejád/Uno sólo, pero este sería otro tema a tratar que nos llevaría mas tiempo aún. Solamente hacer mención con éste versículo de Jn 1:1 que al propio Yeshúa se le describe como la Toráh, entonces si esto es así ¿Cómo podemos pensar en ningún momento que la Ley/Toráh es mala o maldición o que está ABOLIDA? Sería lo mismo que decir que Yeshúa es malo o una maldición o que está ABOLIDO/OBSOLETO, nadie seríamos salvos y estaríamos cometiendo un grave error, así que quien enseñase ésta herejía, se encontraría en un craso error, pero este no es el caso del apóstol Pablo, como veremos a continuación.

Entonces para ir atando cabos y resumiendo, vemos que la base y cimientos en quien hemos creído, Yeshúa ha Mashíaj, nos está enseñando a guardar los mandamientos de Elohím, es decir Sus Mandamientos/Toráh y que en ningún momento Él esta señalando y en ningún versículo está enseñando que la Toráh fue abolida y que ya no hay que cumplirla, ya que Él fue el primero que la guardó, se sujetó y enseñó a hacer lo mismo, como un Maestro le enseña a sus discípulos/Talmidín, y nosotros como discípulos de Yeshúa debemos de imitarle y hacer la voluntad del Padre al igual que Él la hizo, es nuestro Maestro, no olvidemos este detalle de importancia.

Teniendo claro éste asunto, ahora analizaremos al Rav Shául/Apóstol Pablo, su fundamento en la fe/emunáh, y su desarrollo como “cristiano”, ya que este proceso nos llevará a comprender mejor esos versículos “conflictivos” en los cuales observamos discrepancias con lo que el propio Yeshúa enseñaba (su Maestro) y lo que él mismo enseñaba, porque cabe destacar que no todos los versículos de Pablo/Shául en los que se refería hacia la Toráh/Ley/ley, eran en contra de ésta, también Shául la exaltaba y la ponía en excelencia (Ro 7:12), como veremos a continuación; de ahí cabe mencionar dicha confusión o contradicción del propio rav Shául, es decir, en algunos lugares de la Escritura, Shául exalta a la Toráh, y en otros…¿la condena?.......(¿…?).

He de aclarar que la lectura y el descubrimiento del libro de Nehemia Gordon “El Yeshúa hebreo frente al Jesús Griego” ha sido una gran bendición y arroja mucha luz sobre este tema tan controvertido como es “¿debemos de guardar o no la Toráh a partir del Nuevo Testamento?”, ya que él dedica el libro de estudio a otro tema muy interesante y fundamental para comprender mejor todo el PR, como es el descubrimiento del libro de Mateo en hebreo, su traducción y las diferencias que encontramos frente a la versión griega, pero Nehemia aborda un tema de suma importancia, que son las costumbres farisaicas/rabínicas, de las cuales trataremos de resumir brevemente para comprender bien a qué se está refiriendo Shául cuando dice que, por ejemplo, “ya no estamos bajo la ley, sino bajo la gracia”.

Debemos de recordar quien era el Apóstol Pablo antes de su conversión y quien fue después de ésta. Nos dice la Escritura en  Hechos 22:1-3

1 «Hermanos y padres, oíd ahora mi defensa ante vosotros».
2 Al oir que les hablaba en lengua hebrea, guardaron más silencio. Él les dijo:
3 «Yo de cierto soy judío, nacido en Tarso de Cilicia, pero criado en esta ciudad, instruido a los pies de Gamaliel, estrictamente conforme a la Ley de nuestros padres, celoso de Dios como hoy lo sois todos vosotros.

Y en el capítulo de Hechos 23:6 dice:
“Entonces Pablo, notando que una parte era de saduceos y otra de fariseos, alzó la voz en el Concilio:
--Hermanos, yo soy fariseo, hijo de fariseo; acerca de la esperanza y de la resurrección de los muertos se me juzga.”

Y en el capítulo de Hechos 21:24 dice:
“Tómalos contigo, purifícate con ellos y paga sus gastos para que se rasuren la cabeza; y todos comprenderán que no hay nada de lo que se les informó acerca de ti, sino que tú también andas ordenadamente, guardando la Ley.”

En muy pocas ocasiones nos hemos parado a estudiar estos versículos y profundizar en ellos, no recuerdo ninguna, tal vez una, y muy vagamente… Más bien cuando se ha hecho un estudio de la persona de Pablo antes de su conversión, siempre ha sido destacando su lado más “cruel y salvaje”, el de “Pablo el perseguidor y exterminador de la iglesia”. Pero al leer estos versículos y profundizar un poco en lo que nos están revelando, vemos que Shául/Pablo aquí ya era un creyente en el Mesias/Cristo, fielmente comprometido con Yeshúa y Su iglesia/cuerpo.

Vemos que fue instruido fielmente bajo los pies de un rabino ortodoxo fariseo muy famoso en su época y hasta los dias de hoy, llamado Gamaliel, y gracias al libro de Nehemia Gordon “El Yeshúa hebreo frente al Jesús griego” podemos saber algo de lo poco que conocíamos a cerca de los fariseos, hoy conocidos como judíos rabínicos ortodoxos. Principalmente un punto importante y revelador.

Hoy sabemos que el judío fariseo/ortodoxo tiene dos Toráh, una Escrita en tablas de piedra dadas a Moisés en el monte Sinaí directamente de Yahwéh, y la segunda es la Toráh oral, que dicen los rabinos sabios/padres/patriarcas que después de que Elohím le entregase a Moisés la Toráh Escrita, le entregó la Toráh oral y se fue transmitiendo de generación en generación. El problema reside en que la Toráh oral pasó a ocupar el primer lugar hasta el punto de casi suplantar a la Toráh Escrita (incluso hoy dia) que fue la que genuinamente le dio YHWH a Moshé; estando llena (la Toráh oral) de mandamientos, leyes y ordenanzas de hombres que se iban transmitiendo y que iban agregando aún más mandamientos, tales como el hacer oraciones dándole gracias al Padre porque mando hacer “tal cosa” que en realidad nunca mandó hacer y no se encuentra registrado en toda la Palabra de Elohím, o mandamientos de ponerse una prenda de vestir antes que otra siguiendo un amplio ritual, o el famoso “lavamiento de las manos” antes de comer (del cual acusaron a Yeshúa de que sus discípulos no lo hacían) que Elohím nunca mandó en Su Toráh y así un etcétera bastante largo. Por desgracia lo que se ha conseguido con tantos mandamientos y ordenanzas y leyes de hombres, es agotar espiritualmente y alejar de la Toráh Genuina, la dada por Elohím a Moshé, al Pueblo Elegido, ya que difícilmente nadie puede guardar todos estos mandamientos diariamente sin saltarse ninguno, mandamientos de hombres, no de Elohím. (Para saber más a cerca de éste tema, leer el libro “El Yeshúa hebreo frente al Jesús griego” de Nehemia Gordon”).

Siguiendo con el estudio de los versículos de Hechos 22:1-3, observamos entonces y comprendemos mejor a lo que Shául se está refiriendo al decir en el v.3 “…estrictamente conforme a la Ley de nuestros padres”, nótese que no está diciendo “conforme a la Ley de nuestro Elohím o de Moisés” ahí la diferencia.

Pero siguiendo la lectura de Hechos 23:6, Shául impera de que él es fariseo, no que hubiese sido en el pasado, sino que el dice “yo soy fariseo”, está hablando en presente, aun cuando ya Pablo se convirtió a su Mesías, él seguía afirmando que él era fariseo (Fil 3:5). Así que sabemos que Pablo como fariseo guardaba dos Toráh, la Escrita y la Oral, y que estaba estrictamente instruido en ambas, como buen fariseo que era.

Comprobamos que Shául también guardaba la Toráh Escrita y lo encontramos en Hechos 21:24, donde al encontrarse con los hermanos, judíos (que guardaban la Toráh Escrita) que habían creído y habían aceptado a Yeshúa como su Mesías, aclaran una situación concerniente a la Toráh, de la que se estaba murmurando en contra de Shául de que estaba enseñando a apostatar de Moisés, por lo tanto a NO guardar/sujetarse a la Toráh (notese aquí que a diferencia de versículos anteriores, aquí si está haciendo mención a Moisés, y por lo tanto se entiende que se esta haciendo referencia a la Toráh Escrita), Hechos 21:17-24, por eso el texto concluye diciendo: v.24 “que tú también andas ordenadamente, guardando la Ley/Toráh.”

Entonces llegados a este punto, ¿Cómo es que Pablo guardaba la Ley/Toráh, si el era cristiano, apóstol  y ministro en fundar iglesias??? ¿No enseñó él “que ya no estábamos bajo la ley sino la gracia y que todos los que dependen de las obras de la ley están bajo maldición??? ¿¿Cómo puede ser esto??

En Filipenses capítulo 3:5y6 dice:
5 circuncidado al octavo día, del linaje de Israel, de la tribu de Benjamín, hebreo de hebreos; en cuanto a la Ley, fariseo;
6 en cuanto a celo, perseguidor de la iglesia; en cuanto a la justicia que se basa en la Ley, irreprochable.

Existe un “pequeño-gran” problema en las traducciones que tenemos del Nuevo Testamento, que es la propia “TRADUCCIÓN”, ya que por ejemplo en el caso que nos atañe, la “ley/Ley/Toráh”, en el original del NT en griego se usa la palabra νομοç/nómos que según la definición Nº Strong 3551 dice: repartir especialmente comida o forraje a los animales, ley (mediante la idea de uso prescriptivo), regulación, ley de Moisés, pleito, ley.

Por lo tanto no se usaron diferentes palabras en griego a la hora de traducir el NT para dar el significado correcto en cada situación y sobretodo al hacer referencia a la Ley/Toráh, por el contrario se empleó una sola palabra “nómos” para recoger todo lo concerniente a la palabra “ley”, ya fuese Ley/Toráh Mosaica (por ejemplo), o Ley/Toráh oral farisaica, o bien al hacer mención a la “ley del pecado” o cualquier ley o mandato del propio país bajo el gobierno romano; es decir, si aparece la palabra “ley” no importa a que ley se esté refiriendo, usemos “nómos” y así simplificamos (pensarían los traductores de griego del NT). 

Un ejemplo lo encontramos en Ro 7:2
“La mujer casada está sujeta por la ley al marido mientras este vive; pero si el marido muere, ella queda libre de la ley que la unía a su marido.” –La palabra usada aquí para expresar “ley” sigue siendo “nómos”, y la pregunta es ¿A que tipo de “ley” se está refiriendo aquí el apóstol Pablo, a la Ley Mosaica, a la Ley Farisaica, o a la ley/acta/pacto/decreto matrimonial??? Pienso que la pregunta queda claramente contestada.

De ahí que no diferenciemos bien a que “ley” se está refiriendo Shául en los versículos anteriores de Filipenses 3:5y6, cuando dice:
5 …”en cuanto a la Ley (Toráh oral), fariseo;”
y el 6 …”en cuanto a la justicia que se basa en la Ley (Toráh Escrita), irreprochable.”

Shául esta hablando de dos leyes diferentes en estos dos versículos, el problema es que no podemos entenderlo a simple vista, porque primero: en la traducción no existe diferencia de un tipo de ley u otra como ya hemos visto, y segundo: porque no estamos familiarizados con el entorno cultural-religioso de la época y ni siquiera hoy día en lo relacionado a la religión judía rabínica ortodoxa.

Por lo tanto para ir concluyendo este escueto estudio, que ni por tiempo ni espacio se pueden tratar más versículos “controvertidos” como los que estamos estudiando, vamos a finalizar tratando de dar una breve explicación a algunos de los versículos que mencionábamos al comienzo del estudio, como por ejemplo:
Ro 6:14 Porque el pecado no se enseñoreará de vosotros; pues no estáis bajo la ley, sino bajo la gracia.

Por ejemplo, para poder explicar este versículo “aislado”, existe un estudio previo hecho por el autor, donde se muestra más ampliamente el significado de lo que Shául/Pablo está diciendo a cerca de “no estar bajo la ley”. Para simplificar y poder así dar una breve explicación, basta con situarnos en el contexto de lo que el Rav Shául nos está enseñando, para ello hay que comenzar a leer desde el capítulo 5 verso 12 en adelante hasta el capítulo 7 verso 25.

En estos versículos hayamos mucha información y mucha “controversia o contradicción”, por eso debemos comprender bien y escudriñar, a qué tipo de “ley” se está refiriendo el Rav Shául en cada ocasión para no llevarnos a la confusión de la cual hemos sido presos durante tanto tiempo. Ya que en esta porción, el Rav Shául está haciendo una descripción a cerca del pecado, de cómo entró por un hombre (Adán) y reinó la muerte, y de cómo por medio de Yeshúa vino la justificación y la vida; de cómo el pecado ya no debe de reinar en nosotros, como dice en

Ro 6:12 “No reine, pues, el pecado en vuestro cuerpo mortal, de modo que lo obedezcáis en sus concupiscencias;”

y si seguimos leyendo hasta Ro 7:21-23 que dice

 “ 21 Así que, queriendo yo hacer el bien, hallo esta ley: que el mal está en mí.

22 Porque según el hombre interior, me deleito en la Ley de Dios;

23 pero veo otra ley en mis miembros, que se rebela contra la Ley de mi mente, y que me lleva cautivo a la ley del pecado que está en mis miembros.”

Por lo tanto, habiendo hecho un breve resumen, debemos de saber que para comprender versículos aislados como el de Romanos 6:14 “…pues no estáis bajo la ley”, debemos de leer el contexto; una vez hecho, ahora que tenemos conocimiento de la palabra usada en griego (nómos), para traducir las diferentes formas que encontramos en el Nuevo Testamento para referirse a la palabra “ley”, debemos de intentar comprender a qué tipo de “ley” se está refiriendo el Rav Shául, para no cometer ningún tipo de error en la interpretación. Vemos pues que siguiendo estos pasos, cuando nos preguntamos ¿A qué tipo de “ley” se está refiriendo en Ro 6:14?, el mismo pasaje nos da la respuesta, que la encontramos en el versículo 23 del capítulo 7 de Romanos, subrayado anteriormente.

Así que para concluir con éste versículo de Romanos 6:14, entendemos ahora lo que el Rav Shául nos quería decir, cuando se estaba refiriendo a que ya “no estais bajo la ley”, la ley del pecado y no a la Ley/Toráh de Dios/Elohím como habíamos creído durante tanto tiempo.

Ef 2:15 aboliendo en su carne las enemistades, la ley de los mandamientos expresados en ordenanzas…

Siguiendo la regla que hemos usado para poder comprender el versículo anterior de Ro 6:14, podemos conocer a que “ley” se está refiriendo aquí el Rav Shául. Para una mayor y mejor comprensión vayamos a la carta a los Colosenses capitulo 2:13-15

“13 Y a vosotros, estando muertos en pecados y en la incircuncisión de vuestra carne, os dio vida juntamente con él, perdonándoos todos los pecados,

14 Anulando el acta de los decretos que había contra nosotros, que nos era contraria, quitándola de en medio y clavándola en la cruz/madero,

15 y despojando a los principados y a las potestades, los exhibió públicamente, triunfando sobre ellos en la cruz/madero.”

Por lo tanto, el propio Rav Shául nos da la respuesta al versículo de Ef 2:15 un poco más adelante, en la carta a los Colosenses capitulo 2:13-15. Viendo así que  a lo que se estaba refiriendo con  lo de “la ley de los mandamientos expresados en ordenanzas” citada en Efesios, se estaba refiriendo al “acta de los decretos (la lista de nuestros pecados) que había contra nosotros”.

Gal 3:13 Cristo nos redimió de la maldición de la ley, hecho por nosotros maldición (porque está escrito: Maldito todo el que es colgado en un madero)

Aparentemente parece que el Rav Shául nos está diciendo en este versículo que la Ley es una maldición en su totalidad, es decir, en todo su conjunto desde el principio hasta el fin de la Ley; y sigue diciendo que de ésta “Ley maldita” Cristo nos redimió. O por lo menos eso es lo que nos da a entender. Pero lo curioso es que el versículo no termina aquí, sino que continúa, haciendo referencia a un texto de la Toráh/Ley en el Antiguo Testamento/Tanáj, que encontramos en Deuteronomio 21:22-23 que dice:

“22 Si alguno hubiere cometido algún crimen digno de muerte, y lo hiciereis morir, y lo colgareis en un madero,

23 no dejaréis que su cuerpo pase la noche sobre el madero; sin falta lo enterrarás el mismo día, porque maldito por Dios es el colgado;…”

Ahora podemos comprender correctamente el versículo de Gal 3:13 y sabemos de lo que Cristo/Yeshúa nos redimió. Nos redimió de ocupar nosotros Su lugar en el madero, ya que nosotros hemos cometido crímenes/pecados que son dignos de muerte, y por lo tanto éramos dignos de ocupar la cruz/madero y ser malditos por Dios/Elohím. Así que Yeshúa nos libró de la maldición de ser colgados en un madero, una ordenanza de la Toráh/Ley, que hace referencia concretamente a lo que nos está enseñando el texto “maldito por Dios es el colgado”. Fuimos librados de éste mandamiento exclusivamente, porque Yeshúa ocupó nuestro lugar, y no como hemos mal entendido “de toda la Toráh/Ley”, suponiendo así (equivocadamente) que toda la Toráh era una maldición.

Gal 3:10 Porque todos los que dependen de las obras de la ley están bajo maldición, pues escrito está: Maldito todo aquel que no permaneciere en todas las cosas escritas en el libro de la ley, para hacerlas. [RV95]

Para concluir el pequeño estudio y el análisis de estos versículos “aparentemente contradictorios”, nos vamos a centrar en este último versículo, en Gálatas 3:10, vamos a ir por partes para obtener una mejor comprensión de éste, y de lo que Shául nos quería mostrar.

Analicemos por partes lo que el versículo nos dice:

“Porque todos los que dependen de las obras de la ley están bajo maldición,”. Si leemos este mismo versículo en otra versión más antigua, la versión Reina Valera Antiqua del 1569, nos encontramos que existe una pequeña palabra que modifica la interpretación del comienzo del texto:

“Porque todos los que son de las obras de la ley, están bajo de maldición.”

La palabra “dependen” es cambiada por “son”, y esto nos ayuda a comprender mucho mejor lo que Shául nos pretende enseñar como veremos a continuación.

Si continuamos con la lectura del texto, vemos que sigue diciendo:

“pues escrito está: Maldito todo aquel que no permaneciere en todas las cosas escritas en el libro de la Ley/Toráh, para hacerlas.”

¿¿Entonces en qué quedamos?? ¿¿Somos malditos si dependemos de las obras de la ley, o somos malditos sino permanecemos en todas las cosas escritas en el libro de la Ley/Toráh?? ¡¡Qué contradicción!!

A lo que se está refiriendo el Rav Shául en este texto tan “contradictorio” es a las dos Toráh, por eso hemos usado el texto de la versión de Reina Valera Antiqua de 1569, para arrojar un poco de luz sobre el asunto. El porqué de esta deducción, lo encontramos desde el comienzo de la carta en el capitulo 1 versículo 1 hasta el versículo 7 del capitulo 4, donde podemos comprobar que Shául está advirtiendo a los hermanos de Galacia de algunos que se hacen llamar “hermanos” y que predican otro evangelio diferente al que él enseña, que le fue dado directamente del Adonai Yeshúa. Estos “hermanos” se dedican a judaizar, y a confundir a los nuevos creyentes en Yeshúa, enseñándoles a guardar ritos y prácticas que no vienen recogidas en la Toráh Escrita dada directamente de Elohím que fue el propio Yeshúa/Elohím quien enseñó a guardar, como vimos al principio; sino que éstas prácticas, mandamientos y enseñanzas, son de hombres, recogidas en la Toráh Oral, de las cuales Shául conocía bastante bien como fariseo que era y sabía perfectamente que no llevaban a ninguna parte, y mucho menos a la salvación.

Por ello que se lleva casi los 4 primeros capítulos de la carta abordando el tema, tratando de advertir a los hermanitos de Galacia de que se cuiden de tales “maestros” que enseñan tales doctrinas, leyes y mandamientos, difíciles de cumplir y que de nada aprovechan.
Por lo tanto ahora podemos comprender de manera diferente a lo que creíamos, este versículo, notando que la enseñanza de Shául es otra:

“10 Porque todos los que son (fariseos) de las obras de la ley (oral), están bajo de maldición. Porque escrito está: Maldito todo aquel que no permaneciere en todas las cosas que están escritas en el libro de la ley, para hacerlas.”

Finalmente y para concluir, si esto no fuera así, Shául se vería inmerso en un grave problema. Como persona sujeta y entendida en la Toráh, estaría anulando un Mandamiento de Elohím/YHWH/Yeshúa deliberadamente, que se encuentra en Deuteronomio 27:26 que dice:

“Maldito el que no confirmare las palabras de esta Ley/Toráh para hacerlas. Y dirá todo el pueblo: Amén.”

ROMANOS 6:14

Para comprender mejor sobre a lo que nos referimos a cerca de “abordar la Toráh en el Brit Hadashá” y demostrar su vigencia en éste e incluso hasta nuestros días, hay que analizar y escudriñar uno de los versículos claves del rabino Shául que se encuentra en la carta a los Romanos capitulo 6 verso 14, es el famoso “ pues no estáis bajo la ley, sino bajo la gracia”, versículo que por su mala interpretación y colocación fuera del contexto, ha traído mucha confusión y  grandes discusiones, hasta tal punto que miles de creyentes han dejado de lado la Toráh, creyendo erróneamente que ésta ya pasó…, que se acabó. Por lo que a continuación trataremos de analizar este versículo de la manera más detallada y minuciosamente posible.

Para hacer posible la comprensión del versículo y comprobar a que tipo de “ley” se está refiriendo Shául aquí, debemos de ir un poco para atrás en los textos, para podernos situar mucho mejor en todo el contexto de la rica y edificante enseñanza que  nos está brindando el rabino Shául.

En todo momento, Shául se está refiriendo a una ley que se encuentra implícita en nosotros desde los inicios de la creación, es la “ley del pecado”, como veremos a continuación.

- Shaúl comienza su enseñanza a cerca del pecado a partir del (Cap. 5:12), “de cómo por Adam entró el pecado en el mundo y por el pecado la muerte, y que así la muerte, pasó a todos los hombres”. Por lo tanto si nos fijamos bien, Shául ya nos está mostrando que existe una ley/ordenanza establecida que veremos a continuación, y es que porque Adam pecó, por esta regla/ley, todos los hombres venimos a ser pecadores y estamos condenados a muerte.

A continuación Shául nos está relatando a lo largo del Cap. 5 de Romanos, la obra redentora de Yeshúa y su victoria frente al pecado, siguiendo esta formula: “Adam = Pecado, Yeshúa = Muerte al pecado (Salvación). Como vemos en Ro. 5:18:

Así que, como por la trasgresión de uno vino la condenación a todos los hombres, de la misma manera por la justicia de uno vino a todos los hombres la justificación que produce vida.

y sigue diciendo en Romanos 6:6-7 y 10:

6 sabiendo esto, que nuestro viejo hombre fue crucificado juntamente con él, para que el cuerpo del pecado sea destruido, a fin de que no sirvamos más al pecado,
7 porque, el que ha muerto ha sido justificado del pecado.
10 En cuanto murió, al pecado murió una vez por todas; pero en cuanto vive, para Dios vive.

Por lo tanto vemos en estos versículos la enseñanza de Shául sobre esta regla/ley a cerca del pecado, de cómo por Yeshúa ha sido destruida. Esta “ley” a la que estábamos sujetos desde Adam y que de la única manera que podíamos ser librados era por medio de Yeshúa, que al ser clavado en el madero pudo así ser destruida, clavada juntamente con Él, la “ley del pecado que arrastramos genéticamente y espiritualmente en nosotros desde Adam”. Esta “ley” de la cual éramos esclavos, y de la cual fuimos librados por medio de la obra Redentora de Yeshúa ha Mashíaj. Ro 6:20.

Por eso, dentro de todo el contexto de lo que Shául nos está relatando, podemos observar que a la “ley” que se está refiriendo en Romanos 6:14, no puede ser otra, que a la “ley del pecado”, es decir, ésta es la Gracia, que a través de la obra redentora de Yeshúa, aquella ley que moraba en nuestros cuerpos que heredamos de Adam, fue clavada en el madero y destruida, y que ya no estamos bajo la ley del pecado que moraba en nosotros desde entonces, sino que  ya estamos bajo la gracia, habiendo sido libertados por medio de Yeshúa de ésta “ley/regla/ordenanza/maldición”, entonces ¿¿¿Cómo podemos saber que la ley del pecado es tal y de donde procede esta ley??? Fijémonos bien en lo que el propio Elohím Yahwéh dijo a Adam en Bereshit 2:16-17: (IMPORTANTE)

16 Y mandó YHWH Dios al hombre, diciendo: «De todo árbol del huerto podrás comer;
17 pero del árbol del conocimiento del bien y del mal no comerás, porque el día que de él comas, ciertamente morirás».
Por lo tanto aquí encontramos la “ley/mandamiento/ordenanza” antigua que fue impuesta por Elohím a Adam y que Adam quebrantó, y que por culpa del incumplimiento de Adam de esta ley/mandamiento que Elohím le dio directamente, todos fuimos condenados a muerte.

Finalmente para concluir esta primera parte a cerca del Capítulo 6 de Romanos, y por consiguiente, la solución y aclaración del controvertido versículo de Ro 6:14, despejamos una posible duda que podría surgir al leer a continuación el versículo 15 que dice tocante a la “ley” lo siguiente:

15 ¿Qué, pues? ¿Pecaremos porque no estamos bajo la ley, sino bajo la gracia? ¡En ninguna manera!

La posible duda que surge, es si se está refiriendo en este caso a la Toráh. La respuesta sería que NO. Vuelve a referirse a la misma ley del pecado de la que hablábamos con anterioridad, ¿Por qué?, sencillo, analicemos el versículo como lo hicimos con los anteriores y podremos resolver con la ayuda de Elohím a lo que el Rav Shául se estaba refiriendo en Ro 6:15, 

(porque muchos creyentes incluso hoy día, piensan que  como “una vez salvos, siempre salvos” por lo tanto no importa si pecamos o no, ya sea deliberadamente o bien involuntariamente, porque Jesús siempre está ahí para perdonarnos, pero pensar o hacer esto es caer en un tremendo error que nos podría costar la vida, como dice Shául en Hebreos 10:26-29: 

26 Si pecamos voluntariamente después de haber recibido el conocimiento de la verdad, ya no queda más sacrificio por los pecados,
27 sino una horrenda expectación de juicio y de hervor de fuego que ha de devorar a los adversarios.
28 El que viola la Ley de Moisés, por el testimonio de dos o de tres testigos muere irremisiblemente.
29 ¿Cuánto mayor castigo pensáis que merecerá el que pisotee al Hijo de Dios, y tenga por inmunda la sangre del pacto en la cual fue santificado y ofenda al Espíritu de gracia?)



Por lo tanto Shául nos está avisando en el versículo 15 de Romanos 6, que aunque ya no estemos bajo la “ley del pecado” y sí bajo la gracia, esto no quiere decir que tengamos libertad para pecar deliberadamente, como algunos puedan pensar, (malinterpretando el versículo 29 de Hebreos 10, porque al leer nosotros este versículo, no nos damos por aludidos como que también nosotros somos pecadores, mas bien pensamos por poner un ejemplo en los asesinos, apostatas, ladrones, etc…, es decir, los que no conocen la Verdad, los que no tienen a Yeshúa, pero no es así, por lo que deberíamos de preguntarnos ¿Quiénes son los que pisotean al Hijo de Dios? ¿No son acaso todos los que practican el pecado voluntariamente, sea cual éste sea (He 10:26), los que ya han conocido la Verdad?) creyéndose estar por encima del pecado y que por lo tanto tienen el control sobre éste, porque Jesús lo clavó en la cruz y ya no tiene poder sobre nuestras vidas, engañándonos así nosotros mismos. “En ninguna manera” debemos de pensar o hacer tal cosa, concluye el Rav Shául en este versículo.

-- Hemos concluido con la revisión y estudio del capitulo 6 de Romanos, analizando y abordando la Toráh nuevamente en el Brit Hadashá, pero podemos continuar sacando a la luz más información que complementará el estudio realizado anteriormente, tanto la primera parte del estudio “Abordando la Toráh en el Brit Hadashá”, como el estudio en profundidad de Romanos capitulo 6. Para ello vamos a introducirnos en el Capitulo 7 de Romanos, donde comprobaremos que sigue arrojando luz al versículo 14 de Romanos capitulo 6, donde definitivamente concluye Shául con el tema a tratar de “la ley del pecado”.

Para comprender mejor el Capitulo 7 de Romanos, es preciso dividirlo por partes y prestar una especial atención a lo que Shául se está refiriendo cuando menciona nuevamente la palabra “ley/nómos”, ya que si observamos bien, aquí se entremezclan dos tipos de leyes. Por un lado habla de la Toráh, por otro de la “ley del pecado”, comprobémoslo a continuación.

Cuando Shául comienza a redactar el Capitulo 7 de Romanos, en el versículo 1, comienza refiriéndose a dos tipos de leyes distintas, por un lado se está dirigiendo a los que ya de antemano conocen la Toráh, y por otro a la ley del pecado, para así poder abordar mejor el tema de la “ley del pecado”. Quedando de esta forma el versículo 1:

¿Acaso ignoráis, hermanos (pues hablo con los que conocen la Ley/Toráh), que la ley (del pecado) se enseñorea del hombre entre tanto que éste vive?

¿Porqué se han añadido los términos “Toráh” y “del pecado” en este versículo modificando así su interpretación y estructura primitiva? Muy sencillo, volvemos a repetir que Shául desde el capitulo 5 versículo 12 en adelante hasta el capitulo 7 versículo 25 está abordando el tema del “pecado”, como explicamos con anterioridad, de cómo por la transgresión de un hombre entró el pecado en el mundo y por lo tanto la condenación a todos los hombres, y así por la justicia de Otro vino la justificación de vida (Ro 5:18).

En ningún momento Shául está dejando de lado el tema del pecado en estos capítulos que comprenden del 5 al 7 de Romanos, como podemos comprobar por nosotros mismos al revisar esta porción. Cuando Shául concluye el capitulo 6 en el verso 23, nos sigue hablando del pecado, haciendo referencia de que “la paga del pecado es muerte”, y comienza el capítulo 7 tratando el mismo tema con el fin de concluirlo. ¿Por qué se dirige Shául a los que conocen la Toráh? Porque Shául conoce muy bien la Toráh al igual que a los que se está dirigiendo  que también la conocen, para mostrarles que la Toráh se introdujo para que el pecado abundase, como dice en Ro 5:20-21:

20 Pero la ley se introdujo para que el pecado abundase; mas cuando el pecado abundó, sobreabundó la gracia;
21 para que así como el pecado reinó para muerte, así también la gracia reine por la justicia para vida eterna mediante Jesucristo, Señor nuestro.
Y estos saben que la ley del pecado se enseñorea del hombre mientras vive. Como ejemplo hace alusión al matrimonio, en el versículo 2 de Romanos 7, Shául comienza a describir la figura de la esposa frente al marido, de cómo ésta está sujeta al esposo legalmente, pero a partir del versículo 3, Shául aborda nuevamente el pecado como tema principal, cuando dice:

3 Así que, si en vida del marido se uniere a otro varón, será llamada adúltera; pero si su marido muriere, es libre de esa ley, de tal manera que si se uniere a otro marido, no será adúltera.

“Será llamada adúltera” dice el Rabino haciendo referencia a un mandamiento recogido en la Toráh en Lev 20:10. Shául está dirigiéndose a los conocedores de la Toráh para mostrarles nuevamente que el conocimiento del pecado es a través de la Ley/Toráh como vemos en Ro 3:20:

20 ya que por las obras de la ley ningún ser humano será justificado delante de él; porque por medio de la ley es el conocimiento del pecado.

Por lo tanto Shául aprovecha para enseñarnos (a los que conocemos o estamos conociendo, la Toráh) una vez más, que ya no estamos bajo la ley del pecado, pues nosotros pertenecemos al que resucitó, a Yeshúa ha Mashíaj, ya que hemos muerto a la ley del pecado mediante el cuerpo de Yeshúa. Esto es lo que Shául está diciendo a continuación en el versículo 4 y se lo está compartiendo y enseñando a los que conocen la Toráh:

4 Así también vosotros, hermanos míos, habéis muerto a la ley mediante el cuerpo de Cristo, para que seáis de otro, del que resucitó de los muertos, a fin de que llevemos fruto para Dios.

Si esto no fuese así, es decir, si Shául se estuviese refiriendo a la Toráh al decir “habéis muerto a la ley…” en vez de a la “ley del pecado”, encontraríamos nuevamente una contradicción bastante grande en este versículo, y es cuando a continuación Shául dice “para que seáis de otro”, por lo tanto deberíamos preguntarnos lo siguiente: ¿Es que la Toráh fue a caso de otro Dios diferente a Yeshúa? ¿Por qué debemos “ser de otro”, ya no pertenecemos al Dios Jehová severo del Antiguo Testamento, y ahora pertenecemos al Dios de amor/permisivo Jesús? ¿Es que a caso Dios a mudado/cambiado como una mariposa al hacer la metamorfosis y Jesús es el Dios renovado del Antiguo Testamento? ¿A quién pertenecimos antes de pertenecer a Yeshúa?

Evidentemente esto no es así, en ningún momento Elohím/Yahwéh/Yeshúa a cambiado, porque El no cambia, el es y será siempre el mismo (Malaquias 3:6), más bien si en el pasado pertenecimos a otro, ese otro era ha Satán el dios de este mundo, padre del pecado.

Siguiendo con los versículos 5 y 6, Shául vuelve a hacer mención de la ley del pecado, en ambos versículos, ¿Cómo sabemos que esto es así? Lo sabemos porque Shául dice en el verso 5:

5 Porque mientras estábamos en la carne, las pasiones pecaminosas que eran por la ley obraban en nuestros miembros llevando fruto para muerte.
Nunca pudo el Rav Shául estar refiriéndose aquí a la Toráh, porque cuando nosotros estábamos en la carne, no conocíamos la Toráh, y porque principalmente la Toráh es Santa, Justa y Buena (Ro 7:12) porque la Toráh es espiritual, y si la Toráh es espiritual ¿Cómo viviendo en la carne podemos andar en el espíritu y mucho menos conocer la Toráh? (Ro 7:14 y Ro 8:5). Por lo tanto no cabe otra cosa que comprender que a la “ley” que Shául se está refiriendo en este versículo (Ro 7:5) vuelve a ser a “la ley del pecado”, ya que cuando Shául dice: “las pasiones pecaminosas que eran por la ley obraban en nuestros miembros…” no pudo estar pensando jamás en la Toráh, porque como dice en Romanos 7:12:
12 De manera que la Ley/Toráh a la verdad es santa, y el mandamiento santo, justo y bueno.

De modo que al versículo 5 de Romanos 7, habría que añadirle “la ley del pecado” en vez de simplemente dejar la palabra “ley” a secas, porque como a ocurrido, trae mucha confusión.
Aun sigue Shául hablando a los que conocen la Toráh, diciéndoles en el verso 6 estas palabras: 
6 Pero ahora estamos libres de la ley, por haber muerto para aquella en que estábamos sujetos, de modo que sirvamos bajo el régimen nuevo del Espíritu y no bajo el régimen viejo de la letra.
En este versículo encontramos algo interesante y revelador, donde se puede apreciar perfectamente que Shául verdaderamente se está refiriendo a aquellos que conocen bien la Toráh, ya que si esto no fuese así, la interpretación del versículo podría cambiar drásticamente y venir a significar algo totalmente diferente de lo que el propio Shául estaba tratando de enseñar.

Primeramente Shául nos vuelve a recordar una vez más que ya no estamos “bajo la ley del pecado”, hemos sido liberados por medio de la sangre preciosa de Yeshúa, y esto queda demostrado por todas las explicaciones anteriormente citadas, pero ahora centrémonos en lo realmente significativo aquí, ¿Cómo podemos apreciar en este versículo que Shául se está refiriendo a los que conocen la Toráh? En este caso no es fácil, ya que si leemos el final del versículo tal como viene referido, “de modo que sirvamos bajo el régimen nuevo del Espíritu y no bajo el régimen viejo de la letra” podemos entender lo que venimos entendiendo durante tanto tiempo por su mala interpretación, al desconocer la cultura Judía, y sobretodo al desconocer la Toráh. Entonces lo que “aparentemente” vendría a decir el versículo y por lo tanto entenderíamos (mal entendido) es que debemos de vivir en el régimen nuevo del Espíritu y no bajo el régimen viejo de la letra, que entenderíamos por “letra” a la Ley Mosaica/Toráh, pero viendo el significado de la palabra en griego, y viendo el contexto y a quienes se estaba refiriendo Shául en esta porción, descubrimos un significado diferente.

La palabra utilizada en griego es “grámma/
gramma/Nº Strong 1121: que significa: escrito, escritura, carta, etc…” y que con esta conclusión Shául le estaba mencionando a los “conocedores de la Toráh” precisamente el mandamiento de Elohím para Adam que viene recogido en la Toráh en Bereshit/Génesis 2:16-17:

16 Y mandó YHWH Dios al hombre, diciendo: «De todo árbol del huerto podrás comer;
17 pero del árbol del conocimiento del bien y del mal no comerás, porque el día que de él comas, ciertamente morirás».
¿Cómo llegamos a esta conclusión? Llegamos a esta conclusión debido a que Shául comienza el versículo 6 de Romanos capitulo 7 diciendo: “Pero ahora estamos libres de la ley, por haber muerto para aquella en que estábamos sujetos” Recordando así que esa ley a la que se refiere a la que estábamos sujetos desde la transgresión de Adam, era la ley dada por Yahwéh a Adam de no comer del árbol del conocimiento del bien y del mal, ya que si esto ocurría (que ocurrió) dijo Yahwéh: “ciertamente morirás”, y en consecuencia esto fue lo que le ocurrió no solamente a Adam, sino al resto de la humanidad (Ro 5:18a).

Finalmente y para concluir con este estudio a cerca de la Toráh en el Brit Hadashá/Pacto Renovado, en lo concerniente a la carta a los Romanos capítulos 5, 6 y 7, y para traer clarividencia en torno al versículo central de Romanos 6:14 “pues no estáis bajo la ley, sino bajo la gracia.” Vemos como Shául concluye en el capítulo 7 haciendo una clara referencia a lo mencionado en todo este estudio, cuando se está refiriendo a la “ley del pecado”, ya que finalmente él mismo lo enseña, en los versículos del 21 al 25 dice:

21 Así que, queriendo yo hacer el bien, hallo esta ley: que el mal está en mí.
22 Porque según el hombre interior, me deleito en la Ley de Dios;
23 pero veo otra ley en mis miembros, que se rebela contra la ley de mi mente, y que me lleva cautivo a la ley del pecado que está en mis miembros.
24 !!Miserable de mí! ¿quién me librará de este cuerpo de muerte?
25 Gracias doy a Dios, por Jesucristo Señor nuestro. Así que, yo mismo con la mente sirvo a la ley de Dios, mas con la carne a la ley del pecado.

Concluimos pues demostrando que ciertamente Shául se está refiriendo en Ro 6:14 y en los capítulos 5, 6 y 7 y parte del capitulo 8 principalmente a la “ley del pecado”, ya que lo enseñado y expuesto anteriormente, Shául lo resume en estos 4 versículos que cierran no solo el capitulo 7, sino que cierra una enseñanza, la evidencia que desde Adam venimos arrastrando desde casi la fundación del mundo, la paga del pecado que es la muerte, y que por mediación del Hijo de Elohím, Yeshúa ha Mashíaj, esta ley fue destruida y ya no somos esclavos de ella, fuimos libertados por la muerte y resurrección de Yeshúa.

Romanos 8:2:

2 Porque la ley del Espíritu de vida en Cristo Jesús me ha librado de la ley del pecado y de la muerte.

Fuente: http://beitshalom.org/articulo.aspx?i=es-py&c=335